dimarts, 2 de desembre del 2014
Història d'Espanya - 06. Societat i Economia (1808-1930)
dijous, 16 d’octubre del 2014
Tècniques d'Estudi
divendres, 3 d’octubre del 2014
L'abolició del feudalisme
1º. Desde ahora quedan incorporados á la Nación todos los señoríos jurisdiccionales de qualquiera clase y condición que sean.2º. Se procederá al nombramiento de todas las justicias y demás funcionarios públicos por el mismo orden y según se verifica en los pueblos de realengo […].4º. Quedan abolidos los dictados de vasallo y vasallage, y las prestaciones así reales como personales, que deban su origen a título jurisdiccional, á excepción de las que procedan de contrato libre en uso del sagrado derecho a la propiedad.5º. Los señoríos territoriales y solariegos quedan desde ahora en clase de los demás derechos de la propiedad particular, si no son de aquellos que por su naturaleza deban incorporarse á la Nación, ó de los en que no se hayan cumplido las condiciones con que se concedieron, lo que resultará de los títulos de adquisición.6º. Por lo mismo los contratos, pactos, ó convenios que se hayan hecho en razón de los aprovechamientos, arriendos de terrenos, censos, ú otros de esta especie, celebrados entre los llamados señores y vasallos, se deberán considerar desde ahora como contratos de particular á particular.7º. Quedan abolidos los privilegios llamados exclusivos, privativos y prohibitivos que tengan el mismo origen de señorío, como son los de caza, pesca, hornos, molinos, aprovechamientos de agua, montes y demás […].11º. La Nación abonará el capital que resulte de los títulos de adquisición, ó lo reconocerá, otorgando la correspondiente escritura […].14º. En adelante nadie podrá llamarse Señor de vasallos, exercer jurisdicción, nombrar jueces, ni usar de los privilegios y derechos comprehendidos en este decreto; y el que lo hiciese perderá el derecho al reintegro en los casos que quedan indicados.
La vigència d'aquest decret seria efímera pel retorn a l'absolutisme decretat per Ferran VII al seu retorn. A continuació podeu llegir una interessant història sobre l'evolució d'aquest extreta de l'obra de Miguel Martorell i Santos Juliá Manual de historia política y social de España (1808-2011):
[...] El decreto del 6 de agosto de 1811, de las Cortes de Cádiz, abolió los señoríos jurisdiccionales, es decir, transfirió a la nación la potestad que hasta la fecha tenían los señores para ejercer justicia y realizar nombramientos administrativos. Además, suprimió todos los privilegios que tuvieran su origen en los señoríos jurisdiccionales y declaró extinguido el vasallaje y las prestaciones que los vasallos pagaban a los señores. También reconoció a los viejos señores como propietarios absolutos de los señoríos territoriales o solariegos, aquellos sobre los que pudieran demostrar que tenían algún derecho sobre su propiedad. De este modo, abolidos los señoríos jurisdiccionales y los privilegios anejos, y reconocidos como propiedad privada los señoríos territoriales, quedó legalmente desmantelado el régimen señorial. El decreto, no obstante, generó un problema. Muchos señores reivindicaron la posesión de señoríos cuyos derechos emplazaban siglos atrás, cuyos títulos de propiedad se habían perdido con el paso de los años, y otros reclamaron la propiedad de aquellos señoríos sobre los que habían ejercido durante un cierto tiempo algún tipo de jurisdicción. Y ello provocó litigios con los campesinos, que en algunos casos también reivindicaban la propiedad de estas tierras, y en otros se negaban a pagar ninguna renta por las tierras que cultivaban mientras no quedara fehacientemente demostrado quién era el propietario. Antes de que Fernando VII anulara la obra de las Cortes de Cádiz, muchos de estos conflictos habían acabado en los tribunales. La legislación aprobada en el Trienio Liberal trató de proteger a los campesinos. La ley del 3 de mayo de 1823, promovida por los exaltados, obligó a los señores que reclamaran la propiedad de algún señorío a documentar su demanda con títulos de propiedad. La decisión última quedaba en manos de la autoridad judicial, pero mientras la justicia no resolviera los campesinos no estaban obligados a pagar rentas a sus antiguos señores. Sin embargo, la ley de 1823 apenas tuvo tiempo de aplicarse. La legislación del Trienio Constitucional amparaba a los campesinos. Pero durante la regencia de María Cristina, con la guerra carlista en marcha, los liberales —moderados o progresistas— trataron de afianzar el respaldo de la aristocracia a su causa y facilitaron la conversión de los señoríos en propiedad privada de pleno derecho. La ley del 23 de agosto de 1837 restituyó el decreto del 6 de agosto de 1811 y la ley del 23 de mayo de 1823, pero estableció nuevos criterios para la transformación de los señoríos que contravinieron el espíritu de esta última norma. De entrada, dispuso que cuando los viejos señores reclamaran la propiedad de una tierra en la que no hubieran ejercido el señorío jurisdiccional, el mero hecho de que hubieran percibido en alguna ocasión alguna renta resultaba prueba suficiente de que eran suyas y no estaban «obligados a presentar los títulos de adquisición», ni debían ser «inquietados ni perturbados en su posesión». De este modo los señoríos territoriales se transformaron automáticamente en la propiedad privada de quien hasta la fecha había sido el señor. Los tribunales solo debían intervenir si la reclamación de propiedad afectaba a una tierra sobre la que los señores también habían ejercido derechos jurisdiccionales. En estos casos, los viejos señores debían probar su derecho a la propiedad aportando los títulos originales. Títulos que, en muchas ocasiones, se remontaban siglos atrás y no se conservaban. En estos casos, bastaba con acreditar su destrucción con «otros documentos e informaciones de testigos, hechas en la época coetánea y próxima a los sucesos que causaron dicha destrucción»: la constatación de que el archivo de un palacio o castillo nobiliario se había incendiado o destruido en cualquier época bastó para justificar la pérdida de los títulos de propiedad, que en otras ocasiones fueron directamente falsificados. De este modo, la mayoría de los viejos señores ganaron los juicios entablados con los campesinos y se hicieron con la propiedad absoluta de las tierras. En definitiva, la abolición del régimen señorial implantó unos derechos de propiedad capitalistas en el mundo agrario. Al final del proceso la nobleza perdió sus derechos jurisdiccionales, pero a cambio acrecentó su patrimonio al acceder a la plena y libre propiedad de unas tierras cuya titularidad de origen, en muchos casos, resultaba dudosa. Por el contrario, como han apuntado los historiadores económicos Albert Carreras y Xavier Tafunell, el campesinado fue expoliado sin percibir nada a cambio. No es de extrañar, por tanto, que la abolición del régimen señorial contribuyera a sellar los lazos entre la vieja aristocracia y las nuevas élites políticas y económicas liberales. [...]
dijous, 22 de maig del 2014
Enquesta Professor (2013-2014)
dilluns, 19 de maig del 2014
Història d'Espanya - Textos històrics
dimarts, 13 de maig del 2014
Laura Gallego – Finis Mundi
FITXA TÈCNICA
TITOL: Finis Mundi
AUTOR: Laura Gallego Garcia
EDITORIAL: El barco de vapor
EDICIONS: SM 1999
COLECCIO: Dirigida per Marinella Terzi
PAGINES:252
ISBN: 84-348-7011-8
SINOPSI ARGUMENTAL
El llibre tracta sobre un monjo anomenat Michel que ha de salvar el mon de l’apocalipsi. L’acompanya en la seua missió un joglar anomenat Matius i una xiqueta que vol ser joglaressa anomenada Lucia. Ells tres tenen que salvar el mon trobant tres amulets i invocar el Déu del temps. Però hi ha una secta que vol impedir-ho. Ells tres s’endinsen en una aventura per intentar salvar el mon. Ho aconseguiran?? LLIG-TE el llibre per descobrir-ho.
OPINIO PERSONAL ****
Al principi el llibre no em va agradar però a mesura que anava llegint, el llibre tenia cada vegada més intriga i emocions, i continuava llegint per tal de saber per si els personatges aconseguirien el seu objectiu, salvar el món.
Hrystian Nikolaiew
2 ESO A.
dissabte, 12 d’abril del 2014
El sector primari (Esquema)
Ací teniu l’esquema corresponent al tema “El sector primari en Espanya”.
Un infern domèstic – La dona sota el franquisme
Dones rapades en Oropesa (Toledo) per ser familiars de republicans. / sbhac.net
Que el franquisme fou la concreció de l’infern de Dante en la terra per a molta gent és innegable. Que la situació fou infinitament pitjor per a les dones és una qüestió a la que la historiografia no presta gaire atenció en relació amb altres temes. La ínfima relació de llibres publicats sobre la història de la dona en Espanya, en relació a altres temàtiques, demostra aquest oblit. Els llibres de text habituals als instituts tracten el tema de manera molt superficial, i en ocasions, com si es tractés d’un element d’ampliació del que es pot prescindir perfectament. Per això, en un moment en què sembla regressar una actitud paternalista cap a les dones per part de l’estat, és necessari recordar d’on venim per tal de saber on volem anar.
El primer document que vull presentar és la famosa alocució del general Queipo de Llano advertint a les “roges” del futur imminent que esperava les dones.
La violència contra les dones no tingué únicament un caràcter sexual, sinó que adoptà, preferentment un caràcter “sexuat”, és a dir, una repressió dirigida específicament contra aspectes de la femineïtat. En aquest document s’explica la situació en general de les dones durant el franquisme.
Si voleu ampliar, podeu llegir les següents publicacions.
Isabel Morant, Historia de las mujeres en España y en América Latina, Crítica (4 Vols.).
Paul Preston, Palomas de guerra, DeBolsillo.
Pura Sánchez, Individuas de dudosa moralidad, Crítica.
Assumpta Roura et al., Un inmenso prostíbulo: Mujer y moralidad durante el franquismo, Bases.
Irene Abad, Las dimensiones de la “represión sexuada” durante la dictadura franquista.
Manuel Ortiz, La mujer en la dictadura franquista.
La mujer bajo el franquismo (UJI Castelló)
Altres webs interessants:
http://www.publico.es/especial/memoria-publica/
http://www.cuartopoder.es/invitados/la-represion-franquista-contra-la-mujer-las-rapadas/345
divendres, 11 d’abril del 2014
Història d’Espanya - Textos
L’Antic Règim
La crisi de l’Antic Règim
La construcció de l’Estat Liberal
El Sexenni Democràtic
La Restauració
La II República
La Guerra Civil
Transició i democràcia
dijous, 3 d’abril del 2014
Ferran Gallego – El Evangelio Fascista (Editorial Crítica)
L'historiador Ferran Gallego analitza en el seu últim llibre, L'evangeli feixista, l'evolució del feixisme espanyol des de la República fins a 1950, que, segons ha explicat l'autor, denota que "el cas espanyol no va ser molt diferent del d'altres feixismes europeus dels anys 30". L'única peculiaritat que Gallego assenyala per al règim que arranca en 1936 és que "conquista el poder a través d'una guerra civil, però en cap cas es pot negar la seua naturalesa feixista".
Gallego indica que "dir que no va haver-hi feixisme en el règim franquista és tant com negar l'antifeixisme que va combatre en la Guerra Civil espanyola i l'esperit de les Brigades Internacionals, que vénen a Espanya a lluitar contra el feixisme".
Trenca així mateix Gallego la vella idea de la historiografia que el feixisme espanyol va arribar tard i mal: "És veritat que quan vol guanyar-se adeptes, la major part dels seus potencials clients s'han fet de la CEDA o del carlisme, però el feixisme com a fenomen de masses és a Europa un fenomen dels anys 30, amb l'única excepció d'Itàlia".
En El Evangelio Fascista (Ed. Crítica 2014), Gallego situa l'embrió d'aquest feixisme ja en plena República, perquè "no han de confondre's el partit i l'espai cultural de fascinació pel feixisme" que ja es troba en Calvo Sotelo i el Bloc Nacional, que "es declaraven feixistes però no militaven en Falange".
Per a l'historiador barceloní, Falange, un partit minoritari durant la República, es converteix en el partit hegemònic a partir de 1936 perquè "és congruent amb el moment de guerra civil, ja que era un partit militaritzat, no demanava la tornada de cap rei, té un discurs populista, creu en la mobilització de la masses i el seu ideari dóna per superada la democràcia parlamentària". A més, "la seua doctrina s'ajusta a la situació de violència extrema que hi ha a Espanya i està disposada a acceptar un cabdillatge carismàtic".
Al seu parer, el colp d'Estat del 18 de juliol va propiciar el sorgiment d'un moviment de masses a favor de feixisme: "No és un mer colp militar, ja que se suma un poder civil amb 60.000 milicians falangistes i 30.000 requetés". Falange, afegeix Gallego, proporciona un ideari a l'exèrcit, els oficials del qual tindran l'obligació de militar en Falange, una cosa que no succeeix en l'Alemanya nazi.
La Guerra Civil permet als feixistes a més "una unitat del comandament", que no es produeix en el bàndol republicà. La diversitat de forces que es van integrar en la sublevació de 1936 va acabar més endavant facilitant l'oportuna desfascistització del règim, convertit en un estat nacional-catòlic. "Quan el feixisme europeu cau, l'espanyol aguanta perquè es mostra com a garant d'un catolicisme gloriós i ja en 1944-45 planteja una espècie de via espanyola cap a l'estat catòlic fugint del totalitarisme alemany".
Opina Gallego que, per eixa raó, no és exacte parlar d'una antítesi entre catòlics i feixistes en el període analitzat, ja que "el falangisme és des de la seua formació un partit profundament catòlic", que troba en l'Imperi de Carles V el referent simbòlic de la defensa de la societat catòlica enfront de protestants i turcs.
L'autor de Todos los hombres del Führer i El mito de la Transición tanca la seua anàlisi en 1950 perquè poc abans es produeix l'últim debat cultural de l'Espanya de la postguerra sostingut per Pedro Laín Entralgo i Antonio Tovar, partidaris de "incorporar a la Generació del 98, a Machado i Ortega, a la idea d'Espanya", enfront d'intel·lectuals com Rafael Calvo Serer que "rebutgen parlar de diverses Españas legítimes".
Font.
Disponible en la biblioteca del Departament de Geografia i Història.
Signatura: 1 GAL eva
Fitxa Tècnica:
El evangelio fascista
La formación de la cultura política del franquismo (1930-1950)
Editorial Crítica (Barcelona)
Fecha: 2014
984 páginas
ISBN: 978-84-9892-676-7
Formato: 15,5 x 23 cm.
39.90 €
Els pilars de la ciència
En les seues múltiples ramificacions, la ciència també pot ser abordada des de diversos punts de vista. En un intent per proporcionar una mirada diferent de la tradicional narració basada en la línia temporal, l'historiador Miguel Artola i el físic, historiador de la ciència i acadèmic de la llengua José Manuel Sánchez Rom han concebut Los Pilares de la Ciencia (Espasa), que concentra en al voltant de 800 pàgines un repàs de vocació integral per les matemàtiques, la física, la química, la biologia, la medicina, la geologia, l'astronomia i la cosmologia, presentades a través dels conceptes fonamentals que les defineixen des dels seus orígens a l'actualitat.
“Es tracta d'un plantejament distint, on el que es relata són dues qüestions: d'una banda, les metodològiques, i per l'altre un índex de temes singulars, cada un tractat des del principi fins a la fi”, explica Artola. “L'objectiu no és construir una història de la ciència seguint una pauta cronològica”, agrega Sánchez Rom, “sinó que ens hem centrat a buscar les bases, els pilars de la ciència”.
Partint d'una introducció que situa el lector en el començament del viatge del descobriment científic humà, sorgit de l'observació, l'exposició es desplaça cap a l'espurna que va encendre l'especulació, que va portar a la verificació i la subsegüent comunicació dels fets científics, el que derivaria en la demolició dels sistemes especulatius i finalment en la revolució científica. “No sols ens ocupem de les idees, sinó també d'elements d'índole social o socioeconòmica, que també són essencials per a la construcció de la ciència”, assenyala l'acadèmic de la llengua.
A partir d'ací, el llibre dóna pas a la presentació en capítols individuals dels puntals que sustenten l'edifici de la ciència, com són la força, el càlcul, la composició de la matèria o la quàntica, entre altres. Encara que exposades conceptualment separades les unes de les altres, en el món físic aquestes idees estan inextricablement relacionades, el que ha suposat una dificultat a l'hora de presentar-les, segons explica Sánchez Ron. La solució: cada capítol presenta referències encreuades; nombres, dates i dades que es repeteixen.
Per a arribar a eixos nombres primers de la ciència, els acadèmics han invertit al voltant de dos anys d'aportacions en comú. “Primer ens vam posar d'acord en quina classe de llibre volíem fer, i vam decidir que no volíem fer res exclusivament cronològic o per països”, indica Artola. “Després acordem l'índex i vam realitzar un esborrany, que Sánchez Rom va redactar”.
Per a acostar el text a tots els públics, el llenguatge utilitzat és clar i concís, sense abusar dels tecnicisme ni els termes científics. “Encara que no hi ha concessions amb el rigor, l'objectiu és que ho puga entendre qualsevol persona”, apunta Sánchez Rom. Com a garantia, addueix, està el fet que un dels dos autors, Artola, no és científic de formació: “Açò és beneficiós, perquè així ens assegurem que no hi ha idees que es donen per assentades”.
A més de comprensible, el llibre, asseguren, és també abastador. “No s'ha quedat res fora”, diu Artola convençut. “És un llibre ambiciós, no es tracta d'una mera introducció, i també és contingut, és a dir, que el lector no necessita altres ferramentes per a entendre-ho”, afegeix Sánchez Rom.”És un text que no és simple divulgació, sinó que planteja com explicar la ciència, que també es pot explicar aïllant els problemes fonamentals. Les solucions poden ser molt complicades, però si un comprén quina és la qüestió plantejada, comprén el que està passant amb la ciència”.
El podeu trobar en la Biblioteca de Gandia:
Signatura: 5 ART pil
Font.
dilluns, 31 de març del 2014
Textos històrics – La dreta espanyola i la II República
Gil Robles
"Había que dar estructura a las nuevas derechas españolas. Era necesario ir a la reconquista de España (...). Y a medida que se avanzaba, las avanzadas y los grupos de resistencias que se encontraban fueron agrupándose en una organización al mismo tiempo flexibe y recia y se constituyó la Confederación de Derechas Autónomas (...). Todo se ha hecho con propósito de englobar a todos con un espíritu generoso, sin ánimo de monopolio, con deseo de abrazar a los que vengan a luchar por las batallas por Dios y por la Patria. ¿Se ha hecho todo eso tan sólo para constituir un partido? El propósito era más amplio, más generoso, más comprensivo. Se quería dar a España una verdadera unidad, un nuevo espíritu, una política totalitaria (...). El elemento unitario para una política totalitaria lo encontramos en nuestra gloriosa tradición (...). Nosotros buscamos ese principio unitario y totalitario en el ideal cristiano de nuestra Patria (...). Vamos a ocuparnos del presenre (...). Estamos en el momento electoral (...). Para mí sólo hay una táctica hoy: formar un frente antimarxista, y cuanto más amplio mejor. Es necesario, en el momento presente, derrotar implacablemente al socialismo (Muchos aplausos) (...). Hay que llamar a todas las fuerzas sociales y antirrevolucionarias, a todas las que vayan contra el materialismo y contra todos los errores que se cifran en una sola palabra: marxismo (Grandes aplausos. Una voz: "Y contra Maciá"). Yo centro mis ataques (...) en el socialismo, y de ahí los derivo a todos los elementos que con él han tenido contacto. De la división de España son en gran parte responsables los socialistas. Sin ellos no se hubiera podido aprobar el Estatuto (Aplausos). lo que ocurre es que centro mis ataques contra los socialistas porque han sido los únicos beneficiarios del más vergonzoso de los pactos, el de San Sebastián, en el que se aliaron el sectarismo, el separatismo y el socialismo (...). La gran necesidad del momento actual es la derrota del socialismo (...). Proyectemos ahora una mirada hacia el porvenir (...). Nuestra generación tiene encomendada una gran misión. Tiene que crear un espíritu nuevo, fundar un nuevo Estado, una Nación nueva; dejar la Patria depurada de masones, de judaizantes... (Grandes aplausos) (...). Hay que ir a un Estado nuevo y para ello se imponen deberes y sacrificios.¡Qué importa que nos cueste hasta derramar sangre! Para eso nada de contubernios. No necesitamos el Poder con contubernios de nadies. Necesitamos el Poder íntegro y eso es lo que pedimos. Entretanto no iremos al Gobierno en colaboración con nadie. para realizar este ideal no vamos a detenernos en formas arcaicas. La democracia no es para nosotros un fin, sino un medio para ir a la conquista de un Estado nuevo (Aplausos). Llegado el momento el Parlamento o se somete o le hacemos desaparecer (Aplausos) (...). Llamo, eso sí, a todos, cuanto mayor número mejor, para terminar esta primera tarea de frenar y liquidar de una vez la revolución (...). Y nada más (...). (Gran ovación. El público despide al orador con aclamaciones de entusiasmo)".
El Bloque Nacional
La dreta més extrema, descontenta amb l'accidentalisme de José María Gil-Robles va anar decantant-se cap a la figura de Calvo Sotelo, qui en la primavera de 1936 actuava ja com el líder de la dreta contrarrevolucionaria. En 1936, abans de les eleccions generals de febrer de 1936, el partit passaria a denominar-se Bloque Nacional.
Entre els seus diputats a les Corts, a més de Calvo i Goicoechea, es troben altres importants ideòlegs de la dreta antirrepublicana, com ara Ramiro de Maeztu, el Conde de Vallellano i Andrés Rebuelta Melgarejo.
Españoles: Un grupo de conciudadanos, representando unos a diversos partidos, otros con su personal significación, os dirigen estas palabras, puesta la mente en España.
La revolución de octubre ha sacudido nuestras fibras más sensibles con el ramalazo de su barbarie. No debemos resignarnos a considerarla como episodio fugaz, ya cancelado, ni a encuadrar su origen en responsabilidades solitarias No La revolución no está vencida todavía porque ha sido el fruto natural de causas políticas que persisten y cuya extirpación necesaria es empeño inaccesible a los actuales gobernantes.
Esa revolución significa el derrumbamiento de todo un sistema estatal. Las esencias políticas que nos legaron las Constituyentes—Poderes y Leyes—fracasaron todas, como sus antecedentes doctrinales, con irreparable estrago. Varias elecciones políticas de signo adverso al imperante en aquellas Cortes han originado ya importantes eliminaciones de tipo orgánico y personal. Subsisten, sin embargo, funestas representaciones del espíritu Constituyente, sin cuya desaparición será una quimera el saneamiento del país, sometido durante largo tiempo a mortal envenenamiento marxista y antiespañol.
Nos encontramos, por tanto, ante una doble crisis: la crisis de un Estado decrépito apenas nacido, y la crisis moral de una sociedad que ha contemplado con impasibilidad suicida la organización metódica de su propio aniquilamiento y el ataque traidor contra nuestra gran unidad histórica. Hay, pues, que reformar el listado y la sociedad. Porque sin la infusión previa de un espíritu nacional, reformas, instituciones, normas atrevidas de un Estado futuro pueden convertirse en retórica a la moda.
Pero la experiencia nos enseña que ese espíritu no florece en igual medida con toda clase de instituciones políticas, pues las hay que con su sola presencia corrompen y dilapidan en discordia y confusión las virtudes sustantivas de un pueblo, y otras, en cambio, que elevan a grado heroico las energías colectivas necesarias para el cumplimiento de una misión histórica.
El Gobierno actual ha desaprovechado ya su hora: una hora de magnífico resurgimiento, una hora histórica y acaso decisiva en la lucha contra la revolución violenta. Ha fallado el Gobierno y con él los partidos republicanos, veteranos y bisoños, reos por igual de miopía e indecisión. Puesto que el clamor popular exige, y no consigue justicia, que no es crueldad, pero tampoco impunismo; puesto que la paz aparece lejana por la rebeldía embravecida de muchos espíritus; puesto que las esencias sagradas de Unidad y Autoridad sufren todavía apretado cerco; puesto que en el Estado nacido en 1931 no quedan ya ni partidos que no estén fracasados ni reservas que utilizar, ni fórmulas eficaces que ofrecer, ni resquicio para la esperanza, nos adelantamos ante el país, libres de responsabilidad en su trágica situación, con probado desinterés y firme voluntad, para hablarle netamente en lenguaje decidido, cordial y patriótico.
Persuadidos de la trascendencia histórica de la revolución del 6 de octubre, momentáneamente frustrada, los firmantes de este escrito, sin abandonar la disciplina política de las organizaciones a que en su mayoría pertenecen, han acordado coincidir en una actuación pública delimitada por estos dos principios: La afirmación de España unida y en orden según frase inmortal de Don Fernando el Católico, y la negación del existente Estado constitucional. España, pues, ante todo y sobre todo. Una España auténtica, fiel a su Historia y a su propia imagen: una e indivisible. De aquí la primera línea de nuestro programa de acción: defensa a vida o muerte y exaltación frenética de la unidad española, que la Monarquía y el pueblo labraron juntos a lo largo de quince siglos. Y con ella la soberanía política única del Estado, que las especialidades forales tradicionales han de vigorizar y fortalecer, lejos de menoscabarla. Y si queremos una España auténtica, debemos declararla católica, mediante la concordia moral del Estado con la Iglesia, ya que, aparte de otras razones, el hecho católico fue factor decisivo y determinante en la formación de nuestra nacionalidad.
Creemos caducado el sistema político, que nacido con la Revolución francesa sirve de soporte a las actuales instituciones y, como Cánovas predijera, nos arrastra al comunismo. El futuro Estado ha de fundarse sobre el deber tanto como sobre el derecho. Los derechos naturales, inherentes a la personalidad humana, han de ser reconocidos y garantizados por el Estado, de conformidad con su distinto rango, sin que en ninguno de ellos quepa el absolutismo. Su mejor garantía será la organización de un Estado fuerte, capaz de frenar el abuso con que pretendan ejercerlos o monopolizarlos núcleos o masas indisciplinadas. Así, nuestra ambición de erigir un Estado de eficaz autoridad rima magistralmente con el respeto debido a las prerrogativas del ciudadano. Porque ningún peligro mayor para ellas que el anejo a ciertas desmesuradas actuaciones de clase. Por eso, los Gobiernos fuertes son, en definitiva, el único sostén de la civilización en que vivimos y de los derechos que nos otorga.
Queremos un Estado integrador que, a diferencia del Estado anárquico actual, imponga su peculiar autoridad sobre todas las clases, sean sociales o económicas. La era ruinosa de la lucha de clases está tocando a su fin. El Estado, arbitro de toda contienda—sea civil, administrativa o criminal—, debe serlo también en las de índole social. No más huelgas, no más lock-outs, como instrumento de lucha económica, y mucho menos de lucha política. El Estado ha de presidir la vida del trabajo, imponiendo una justicia social distributiva, otorgando, por añadidura, al débil, una compensación de justicia y estimulando, donde esta no llegue, la caridad cristiana. Frente a un Estado inhibido, cruzado de brazos, tuvo razón de ser el fenómeno sindical combativo. Frente a un Estado dispuesto a realizar coactivamente la justicia social, el antiestado sindical es un crimen. Hay que encuadrar la vida económica en corporaciones profesionales; facilitar el acceso del proletariado a la propiedad; imbuir en patronos, obreros y técnicos la conciencia de que sirven un supremo interés nacional, que integra los parciales de clase. Esto se logrará cuando la vida del trabajo sea dirigida por un Estado con unidad moral, unidad política y unidad económica.
Coincidimos todos en rechazar el Parlamento fundado en el sufragio universal inorgánico. Estos Parlamentos especialmente en momentos convulsivos, se desgastan vertiginosamente, hasta concluir en fraude. Las Constituyentes, como las actuales Cortes, demuestran que el fenómeno es fatal. Se impone, por ello, una suspensión del Parlamento, cuyo término sea la convocatoria de unas Cortes orgánicas.
Evidentemente, hoy por hoy, el sentimiento nacional genuino está secuestrado por una Constitución antiespañola en espíritu y letra, y la reforma de la Constitución por los trámites en ella previstos, que el sectarismo, deliberadamente, amañó, es una sarcástica utopía. Apremia abrir un cauce a la expresión del sentimiento nacional, aherrojado, para salir de este punto muerto; y nosotros, aun a sabiendas de que la Constitución, traicionando un supuesto espíritu democrático, lo prohíbe, decimos que el régimen actual no tiene más que uno: el referéndum, que no puede rehusar una democracia. Le emplazamos, por tanto, para que compruebe la auténtica opinión nacional, preguntando directamente al país:
¿Acepta o rechaza España el laicismo?
¿Quiere o no España la supresión de la lucha de clases?
¿Quiere o no España la restauración de la gloriosa bandera bicolor como enseña patria?
¿Quiere o no España la supervivencia del actual estatuto de Cataluña?
La respuesta que los españoles, pronunciándose sobre ideas y no sobre personas, diesen en auténtica fórmula de sinceridad ciudadana, a estas preguntas, mostraría seguramente la razón que nos asiste. Y abriría una ruta clara para que el Gobierno patriota y fuerte que España necesita, marchando con paso firme y marcial, lograse en plazo brevísimo el completo desarme moral y material del país y emprendiese sin más dilaciones la ya inaplazable reconstrucción económica nacional, que ha de tener en la Agricultura su más honda raíz. Unas semanas de actuación implacable, dentro del Derecho, devolverían el sosiego a España, el prestigio a la toga, y la fuerza de intimidación al Estado, que nosotros queremos robusto en sus organismos militares. El Ejército, escuela de ciudadanía, depurado por sus Tribunales de Honor, difundirá la disciplina y las virtudes cívicas, forjando en sus cuarteles una juventud henchida de espíritu patriótico e inaccesible a toda ponzoña marxista y separatista. El Ejército no es solo el brazo, sino la columna vertebral de la patria.
Os proponemos, por tanto, españoles, la constitución de un bloque nacional que tenga: por objetivo, la conquista del Estado, conquista plena, sin condiciones, ni comanditas; por designio, la formación de un Estado nuevo, con las características ya descritas, más las dos esenciales de unidad de mando y continuidad histórica tradicional; por medios, la convergencia de todos los ciudadanos que compartan nuestras ideas, cualquiera que sea su actual filiación partidista, respetada y compatible, y de aquellas asociaciones de tipo económico y social que quieran cooperar a esta grande empresa; y como campo de acción, la tribuna, la Prensa, el libro y la calle, o sea, la actividad política extraparlamentaria.
Monárquicos por reflexión y tradición la inmensa mayoría de los firmantes de este documento—republicanos o indiferentes, otros—no planteamos ahora, aun considerándolo sustantivo, el problema de la forma de gobierno; lo que cruje en estas horas trágicas es un Estado; pero el peligro no es solamente para ese Estado, sino que acecha también—¡y cuán vivamente!—a España. Y ello nos fuerza a lanzar este llamamiento para la organización de un arrollador bloque nacional, trémulos de emoción y ardientes de fe. No ocultamos, los que la sentimos, nuestra convicción monárquica, porque el hacerlo atentaría a nuestra dignidad política. Pero creemos que lo que urge es organizar una fuerza social, nacional, nacionalista y nacionalizadora. que se disponga a conquistar plenamente y a poseer ilimitadamente el Estado.
Si, amparados por la protección divina y. al conjuro de la voluntad nacional llegamos a la meta soñada, nos dispondremos—sépalo bien España—a instaurar en la cima y en las entrañas del Estado español los principios de unidad, continuidad, jerarquía, competencia, corporación y espiritualidad, que hemos diseñado.
¡Españoles!: La hora es difícil, gravísima, amarga. Nadie se recluya en su egoísmo. Desdeñemos los convencionalismos. Caminemos alta la frente, en los ojos la luz cegadora del ideal puro, con la verdad integral y patriótica, sin paliativos ni retorcimientos. ¡Por España y para España! ¡Adelante, adelante, adelante, en bloque nacional!
dissabte, 29 de març del 2014
Driss Deiback - Los Perdedores (2006)
Tanmateix, i de manera paradoxal, part destacada en la victòria del Caudillo tingueren les tropes de regulars marroquins reclutades per Franco. En el documental Los Perdedores (2006), Driss Deiback, descriu aquesta brutalitat de l'exèrcit franquista dirigida contra la població civil i l'ús de tropes mercenàries marroquines, com es faria per primera vegada en Astúries en 1934. Però també narra aspectes més desconeguts com el tractament que reberen els regulars marroquins després de la guerra, les nombroses baixes que patiren o les condicions en què hagueren de lluitar. En definitiva, el vídeo intenta aproximar-nos a una part més desconeguda de la Guerrra Civil espanyola, a eixa violència apocalíptica que Queipo de Llano prometia a la població republicana, especialment a les dones, però sobre tot a altres perdedors de la guerra com foren els soldats marroquins que contribuïren a la victòria de Franco.
Si t'interessa més el tema, pots ampliar la informació ací.
dijous, 27 de març del 2014
Edward Malefakis reflexiona en El País sobre el revisionisme i el neorrevisionisme
La Segunda República y el revisionismo
A pesar de los ataques de aquellos que, como Pío Moa, ofrecen hoy una versión aligerada del argumentario franquista, la Segunda República fue un régimen democrático del que España debe sentirse orgullosa
dilluns, 24 de març del 2014
Recentralització, ineficiència i solidaritat fictícia
dimecres, 19 de març del 2014
Comentari de paisatges agraris
Paisatges agraris oceànics o atlàntics.
Paisatge asturià.
Paisatges agraris de muntanya
Paisatge agrari Pirineus (Aran-Alts Pirineus)
Las Alpujarras (Granada)
Paisatges agraris de l'interior peninsular
Dehesa extremeña
Olivar en Jaén
Paisatge agrari de Toledo
Tierra de Campos (Castilla-León)
Viñedos en Cuenca (Castilla-La Mancha)
Viñedos en La Rioja
Paisatges agraris mediterranis
Safor-Tavernes de la Valldigna
Arrossars en el Delta de l’Ebre
El Ejido (Almeria)
Paisatges agraris de les Illes Canàries

Bancals en La Gomera
diumenge, 9 de març del 2014
Textos per a l'estudi de la història d'Espanya
dijous, 6 de febrer del 2014
L’estructura urbana espanyola (Presentació)
La població espanyola (Presentació)
L’espaí urbà
Continguts
1. El concepte de ciutat
2. El procés d’urbanització
3. Morfologia i estructura urbana.
4. Les problemàtiques urbanes.
5. L’ordenació de l’espai urbà.
6. El sistema urbà espanyol en un món global.
Recursos
Resum Bloc II
La població espanyola
Continguts
1. Les fonts demogràfiques.
2. La distribució de la població.
3. El movimient natural de la població.
4. Els moviments migratoris.
5. L’estructura de la població espanyola.
Recursos
Presentació del tema amb material addicional.
Dades actualitzades INE 2013.